Quién mucho abarca, poco aprieta
Refranero popular
Antes de casarme yo era una persona con muchas inquietudes, que gustaba de estar en muchos sitios y hacer muchas cosas, tenía varios círculos de amistades diferentes, y participaba de numerosas actividades colectivas. Por supuesto, todo ello me ocupaba una gran parte de mi tiempo, lo que sumado a las muchas horas que dedicaba al trabajo, hacía que a penas me quedara tiempo libre que invertía en mi familia. ¿Qué hacer? Sentía que el día no tiene suficientes horas para todo aquello que quería hacer. No llevaba una gestión del tiempo óptima, ni siquiera adecuada. No ponía ningún orden en mi vida. ¿Qué hacer en un caso como éste?